Astrónomos observan los últimos instantes de la vida de una estrella
Esta imagen muestra una nebulosa planetaria conocida como NGC 2022, la cual se ubica en la constelación de Orión. A pesar de su nombre, las nebulosas planetarias no tienen ninguna relación con los planetas. Su nombre se debe a que, en otros siglos, estos objetos aparecían en los telescopios como objetos redondos similares a planetas, pero a su vez difusos como las nebulosas.
En realidad, NGC 2022 es una estrella en la última etapa de su vida. La estrella, visible en el centro de la imagen, está rodeada por los gases que solían componer sus capas externas y que fueron expulsadas violentamente al espacio.
Cuando las estrellas similares al Sol llegan al final de sus vidas, comienzan a expandirse hasta convertirse en estrellas gigantes rojas. Durante su repentino aumento de tamaño, las estrellas expulsan sus capas externas al espacio, perdiendo más de la mitad de sus masas durante este evento. Las capas forman un caparazón de gas que envuelve a la estrella moribunda, la cual eventualmente se encoge emitiendo luz ultravioleta que provoca que el gas circundante brille intensamente.
Después de varios miles de años, el gas visible en la imagen desaparecerá y en el centro quedarán los remanentes del núcleo de la estrella de NGC 2022. Estos remanentes estelares son conocidos en la astronomía como enanas blancas.
Crédito: NASA / ESA / Hubble